Garantizar la rentabilidad de cualquier tipo de negocio pasa por contar con una buena planificación de todos los gastos. El coste que supone el desperdicio de comida en un restaurante es muy alto, no solo por el dinero invertido en su compra, sino también en la energía y recursos utilizados en su preparación y conservación. El ahorro en la cocina profesional también pasa por una gestión responsable de las materias primas.
Se calcula que un restaurante puede generar una media de 2,5 kilos de desechos diarios, lo que supone una cantidad aproximada anual de 3.000 euros. ¿Hay forma de evitarlo? Sí, y de ahorrar.
Consejos de restaurante: el ahorro en la cocina profesional
Controlar las áreas donde se desperdicia
Los desperdicios se generan, hasta en un 60%, en el almacenamiento de los alimentos. Durante su preparación se calcula una pérdida del 30% en residuos no aprovechados. Finalmente, el 10% restante proviene de los restos en los platos de los comensales.
Una buena manera de ver cuántos desperdicios se genera según este esquema es separándolos en tres cubos diferentes: almacenamiento, preparación y sala. Hacer esto durante una semana nos permitirá medir los resultados y, en adelante, seguir un plan para reducir los desperdicios.
Reducir los desperdicios con un buen plan
Antes de comprar hay que hacer un inventario completo y lo más ajustado posible para que el ahorro en la cocina profesional sea un hecho. Además, si se organiza el almacenaje ordenando por fecha de caducidad los alimentos que se compren, podrán consumirse primero los más antiguos.
Por otro lado, es importante aprovisionarse de cada alimento según la demanda que tenga y el uso que se le dé.
Elaborar un menú
La carta es uno de los elementos más importantes de un restaurante, pues ayudará diferenciarse de la competencia y construir una buena base de clientes. Hacer un menú de forma adecuada también puede contribuir a generar menos desperdicios.
Si la carta es muy amplia, nos obligará a almacenar más ingredientes, con el consiguiente riesgo de que caduquen. Algo que puede resultar útil es utilizar ingredientes que puedan utilizarse en diversos platos, para así poder aprovecharlos.
Del mismo modo, hay que estudiar los platos que se ofrecen y, si no se piden, cambiarlos o eliminarlos definitivamente, antes de que generen pérdidas.
Es preferible componer un menú diario y ofrecer pocos platos, para poder utilizar los ingredientes que estén por caducar. De esta forma se puede lograr un verdadero ahorro en la cocina profesional.
Reduciendo los costes de la cocina profesional
Estos consejos pueden ayudar a reducir costes económicos, de tiempo y de esfuerzo en cualquier negocio de comida.
Si está buscando reducir los costes de su cocina profesional no olvide la importancia de un correcto mantenimiento. Gracias a nuestros planes de mantenimiento para cocina profesional podrá ahorrar energía y extender la vida útil de sus equipos.